Las primera notas apuntan a que la estética del aparato seguirá las pautas marcadas por los modelos predecesores de la misma familia. Sin embargo, será en su interior donde se descubrirán cambios sustanciales.
Es muy posible que RIM se sume a muchos otros fabricantes dotando sus terminales con potentes procesadores en la panza de sus aparatos. Tanto es así, que ya se comenta sobre la posibilidad de un microprocesador con una velocidad de reloj de 1 GHz, acompañada de una memoria interna para almacenamiento de nada menos que 8 GB de capacidad.
Tratándose de un modelo perteneciente a la primera familia de terminales táctiles de la multinacional canadiense, no podía faltar un renovado SurePress como método principal de introducción de datos, además de una cámara fotográfica con una resolución de 5 megapíxeles.
Pero lo mejor de todo viene de la mano del software que posiblemente incorpore, en un claro intento de hacer frente a los diferentes sistemas operativos orientados a dispositivos táctiles tales como Android o iOS. Por este motivo, posiblemente contaría con una variante de BlackBerry OS 6.0 con soporte para widgets en pantalla, al mas puro estilo del sistema operativo de Google.
Algunas informaciones hablan de un posible acuerdo de desarrollo conjunto entre la empresa canadiense y la afamada compañía desarrolladora de videojuegos Electronic Arts por el que diferentes títulos serían editados especialmente para este modelo de smartphone, con lo que esto significa para su tienda de aplicaciones App World a nivel de apoyo y de cara a futuros acuerdos con otros potentes desarrolladores.
Con todo estos ingredientes debidamente mezclados y sabiamente condimentados, RIM estaría en posición de lanzar un dispositivo contando con un software de ultima generación que aprovecharía la experiencia propia y de la competencia capaz de sacar tajada del usuario de calle y del profesional corporativo.
Un trozo de tarta demasiado grande como para que sus máximos competidores en el campo de los smartphones se queden impávidos a la espera de lo que se les echa encima.