De esta forma Toshiba estaría trasladando y tercerizando su producción de dispositivos móviles a China, buscando de esta forma bajar lo más posible sus costos de producción, debido a la poca demanda y los bajos números de venta que actualmente registra la compañía en Japón.
Información del mercado japonés indica que sus ventas han caído aproximadamente un 30%, por lo que se ha generado una pérdida operacional de unos 10 billones de yenes. Si bien la compañía es la sexta fabricante más grande de Japón, su participación de mercado es de solamente un 7% y su puesto en el ranking global es mucho menor aún.
Por lo pronto la empresa japonesa buscará dar vuelta la página lo más rápido posible, e intentará comenzar a hacerlo por medio del lanzamiento de su nuevo modelo Toshiba TG01, el cual se espera pueda obtener buenos resultados en términos de ventas y así comenzar a revertir la difícil situación actual.
Via: techmovil